Forzar los pagos digitales para obtener una comisión mayor: ¿Es esto atractivo?
El Banco de Irlanda (BOI) se ha subido al tren de los servicios digitales a un alto coste, y mayor pérdida, para sus clientes. De hecho, el BOI anunció que abandonaría las tarjetas de cajero automático y las reemplazaría por tarjetas de débito Visa/MasterCard. ¿Cuál es el truco? El gobierno fija un límite máximo de 2,50 EUR para las comisiones que se cobran a tarjetas de cajeros automáticos, mientras que puede cobrarse dos veces ese importe (5 EUR) a las tarjetas de débito. Por otra parte, si bien en general no se cobra comisiones a las tarjetas de cajero automático de los menores de 14 años de edad, el Banco anunció que solo podrán tramitar una tarjeta de débito Visa con consentimiento de los padres.
También se eliminarán algunos otros servicios de los cajeros automáticos del Banco de Irlanda, incluida la posibilidad de pedir un estado de cuenta, pagar facturas, o agregar crédito al teléfono móvil. Asimismo se recortará el programa de recompensas del Banco, lo que deja a los clientes sin beneficios, excepto el tener que pagar más por menos.
En un momento en el que proliferan los cierres de sucursales bancarias y de cajeros automáticos y en el que el acceso al dinero en efectivo es un tema candente en los medios británicos, sorprende que el Banco de Irlanda no solo recorte servicios que ya estaban automatizados, sino que suba sus comisiones. En el mundo real, ¿eso no sería considerado un suicido comercial? O quizás se trate de una nueva tendencia de la que aún desconocemos sus beneficios.
De todas formas, la respuesta podría ser negativa si el gobierno británico verdaderamente se propone resguardar el acceso al efectivo para todos los ciudadanos británicos, en especial en las áreas rurales. El grupo de consumidores Which? probablemente hará alguna declaración, a menos que los clientes del BOI sean los primeros en llevar su dinero a otra institución.
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