Los costos del efectivo contra los costos de los instrumentos electrónicos de pago

Un nuevo estudio analiza el coste del efectivo en comparación con las tarjetas de débito en 52 países. El estudio identifica y realiza una estimación de los costes de los recursos y privados para determinar el coste social total de ambos instrumentos de pago para consumidores y comercios. El resultado muestra que el coste unitario de las tarjetas de débito es 2,8 veces superior al coste del efectivo en términos globales.

CashEssentials organizará un seminario de un día de duración que lleva por título “Entender los costes de los pagos” y que tendrá lugar el 20 de abril de 2020 en Madrid. El seminario reunirá a economistas, investigadores, académicos y expertos en pagos.

Mastercard comenzará a pagar a las tiendas que entreguen efectivo los clientes, una iniciativa sorprendente tratándose de una empresa conocida principalmente por librar una batalla contra el efectivo.

Google permite ahora a sus usuarios poder pagar las aplicaciones de Android usando efectivo tras el último lanzamiento de la opción de pago ‘Operaciones pendientes’.

En 2016, el 3,5 % de las transacciones con tarjeta en Australia sufrieron un recargo. Para los comercios minoristas, esto constituye un coste de aproximadamente 4 000 millones de USD al año, que inevitablemente se traslada a los consumidores.

Otro festival en Australia rechaza las transacciones en efectivo y deja a los consumidores preguntándose quién se beneficia de las transacciones sin dinero en efectivo.

El acceso a efectivo es cada vez más difícil en algunas partes del Reino Unido, lo que obliga a los minoristas a aumentar los precios e impacta en los hogares de bajos ingresos.

Gracias a VizyPay, el sector del pequeño comercio estadounidense ahora puede ofrecer un descuento de hasta el 4 % del importe de la compra a los clientes que paguen en efectivo.

El regulador del sistema de pagos de UK investigará el mercado de adquisición de tarjetas a raíz de los crecientes costos incurridos por los comerciantes que aceptan pagos con tarjeta, lo que ha provocado un aumento de los precios globales para los consumidores.

Debido al intercambio exorbitante y a las tarifas de servicios sin contacto, un número creciente de comerciantes está abandonando la función Tap-and-Go en el momento del pago en Nueva Zelanda.

Visa experimentó una falla importante en el sistema el 1 de junio, causando estragos entre los consumidores y comerciantes de toda Europa. Es hora de diversificar los pagos?

Los pagos no monetarios incurren en costos ocultos que los consumidores no siempre conocen, escribe la Wharton School de la Universidad de Pensilvania.