Más de la mitad de los usuarios de pagos móviles en Estados Unidos detestan la idea de vivir sin dinero en efectivo
Un estudio de investigación realizado por la empresa de estudios de mercado Origin, revela que los consumidores prefieren no elegir entre el efectivo y los pagos digitales,sino tener ambos a mano. El estudio, Cashless Culture: The Marketer’s Guide to the Emerging Cashless Consumer (Guía del comerciante al consumidor sin dinero en efectivo), se basa en las opiniones de 1 018 usuarios de teléfonos inteligentes cualificados en todo Estados Unidos de distintas edades (18 años o más), género y estado civil.
La información clave que surge de este estudio incluye lo siguiente:
- El 76 % de los consumidores aún lleva dinero en efectivo diariamente
- Al 55 % le desagrada la idea de vivir sin efectivo
- El 45 % de los consumidores no ha usado nunca una aplicación de pago móvil
- El 58 % de los usuarios de pagos móviles informan que han comenzado a usar esta modalidad de pago tan solo en el último año
- El 94 % de los consumidores no abandona su vivienda tan solo con el teléfono móvil y siempre se asegura de llevar efectivo consigo para realizar compras
Comparado con otros países como China, donde casi el 80 % de los usuarios de teléfonos inteligentes realizaron pagos móviles en 2018, tan solo el 20 % de los clientes estadounidenses realizaron un pago móvil. Estados Unidos ha sido relativamente lento para transitar hacia la vida digital cuando de métodos de pago se trata, esencialmente porque muchos consumidores estadounidenses se sienten más cómodos pagando con tarjeta o efectivo, informa eMarketer.
Las tarjetas de crédito y débito fueron clasificadas como el método de pago preferido entre los consumidores estadounidenses. Pero los resultados de la encuesta indican que el efectivo sigue estando muy presente en la vida diaria, ya que constituye el método preferido para devolver dinero a amigos y familiares. Mientras tanto, el 63 % de los encuestados informa que unas indicaciones visuales claras y coherentes sobre las opciones de pago móvil y su funcionamiento aumentarían su predisposición a elegirlo cómo método de pago en lugar del efectivo y de las tarjetas de crédito/débito.
Parte de la investigación consistió en un estudio en el que se privaba de efectivo a diez adultos que aceptaban vivir “sin dinero en efectivo” durante una semana y registrar sus experiencias. Los resultados fueron sorprendentes y pusieron de manifiesto el aspecto de la presión social de los pagos móviles y basados en aplicaciones: “Consulté si el restaurante aceptaba pagos móviles y la camarera me miró con desaprobación,” dijo un participante. Alerta de spoiler: todos los participantes hicieron trampa.
(Cashless Culture: The Marketer’s Guide to the Emerging Cashless Consumer, Hill Holliday, 2019)
A medida que se expande el ecosistema de pagos, también lo hacen los hábitos de pago de los consumidores, pero como observamos, no de la forma que suponíamos. El efectivo, como otras formas de instrumentos de pago, sigue jugando un papel importante en la sociedad estadounidense.
Regístrese y descargue la publicación completa aquí
This post is also available in:
