Link, la principal red de cajeros automáticos del Reino Unido, ha invertido 1 millón de GBP en esta iniciativa en el marco de su Programa de Inclusión Financiera, que contempla mantener la cobertura de cajeros automáticos gratuitos en las zonas más remotas y en el medio rural, así como mejorar el acceso gratuito en las regiones más desfavorecidas del Reino Unido. Según el informe 2019 Access to cash Review, el 47 % de la población británica cree que le resultaría problemático si el efectivo desapareciera de la sociedad, y un 17 % tiene dudas sobre cómo afrontaría esa situación o no podría lidiar con ella.
En octubre de 2019, LINK, anunció el lanzamiento de un Fondo de acceso comunitario a la distribución de efectivo para que los consumidores puedan solicitar un cajero automático cuando lo consideren necesario. Las comunidades locales pueden cursar la solicitud a través de su representante parlamentario o ayuntamiento, o recurrir directamente a LINK para obtener ayuda. Entre los criterios para acceder a la financiación se encuentran la distancia al cajero gratuito más cercano, la disponibilidad de una oficina de correos, la seguridad del sitio y la existencia de una ubicación apropiada. El número de cajeros automáticos en el Reino Unido alcanzó niveles máximos en 2015 con algo más de 70 000 máquinas, pero desde entonces se han cerrado casi 10 000.
El nuevo proyecto piloto se lanzará en octubre, tendrá una duración de seis meses y se desarrollará en 15 tiendas de Inglaterra, Escocia y Gales. Los comercios percibirán una comisión por cada operación de retirada de efectivo que se basa en la comisión de intercambio de los cajeros automáticos LINK. Si el proyecto tiene éxito y cuenta con el respaldo de un marco regulatorio adecuado, LINK podría desplegar este servicio para que miles de tiendas puedan ofrecer acceso gratuito a efectivo en la comunidades locales sin necesidad de disponer de cajero automático.
Los consumidores podrán retirar tanto billetes como monedas con sus tarjetas de débito sin tener que realizar ninguna compra. Esta flexibilidad permite realizar retiradas de menor valor, ya que el importe no está supeditado a las denominaciones que distribuye el cajero automático. El Consejo Europeo de Pagos ha definido el servicio de retirada de efectivo en los comercios como una solución que permite a los clientes retirar dinero de su cuenta de pagos a través de una aplicación para móviles en los comercios participantes que admitan dicha aplicación. A diferencia del reembolso en efectivo, las soluciones para retirar efectivo en los comercios no exigen que el cliente compre productos y/o servicios para hacer uso de las mismas.
Tal y como señala John Howells, consejero delegado de LINK: “Este servicio es una primicia en el Reino Unido y podría resultar una medida importante para que el efectivo siga siendo viable. Suponiendo que los clientes lo consideren un nuevo canal útil, será esencial que el gobierno y los reguladores creen un marco regulatorio eficaz que permita su plena implantación”.